“El primer aporte que tienen las Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) es adelantarse a las tareas del Estado. Y esto no sucede sólo con el tema social, las personas son muchísimas más rápidas que el Estado. ¿Puede el Estado fabricar a un Padre Hurtado? ¿A aquellas personas que crearon las Gotas de Leche o los Patronatos de la Infancia hace 130 años? ¿Hay alguna manera de pasar una ley para que exista y nazca una persona que luego se hará santa? No existe, no se puede hacer. Lo que hace este libro, y se comprueba a lo largo de la historia, es que el Estado va avanzando, creando cosas, pero van surgiendo nuevas necesidades y ¿quiénes las detectan? Otros”.
Estas fueron las palabras del Ministro de Desarrollo Social, Alfredo Moreno, en el seminario y presentación del libro “Comprometidos con Chile: La contribución de las organizaciones de la sociedad civil a la infancia y las personas mayores”, realizado por Sociedad en Acción, iniciativa del Centro de Políticas Públicas de la Universidad Católica y Fundación Chile+Hoy. En esta investigación participó el Hogar de Cristo y su director ejecutivo, Juan Cristóbal Romero, fue parte del comité asesor.
El libro sistematiza la contribución que realizan las distintas Organizaciones de la Sociedad Civil en materia de infancia y personas mayores, comprendiendo que estas van desde juntas de vecinos hasta grandes instituciones, como el Hogar de Cristo. Se recopiló información en cuanto a sus orígenes y motivaciones, presencia territorial, actividades y sus recursos, entre otros. El estudio es una investigación cualitativa y descriptiva y la muestra fue diversa. Se escogieron diversas entidades: 17 de infancia y 12 de adulto mayor, de un universo de más de 234 mil OSC registradas a 2015.
Entre los principales resultados destaca, precisamente lo mencionado por el Ministro Moreno, en relación a que las OSC se adelantan permanentemente a la detección de problemáticas que no están dentro de las políticas públicas y que cuentan con años de experiencia en el trabajo con niños y adultos mayores.
Ignacio Irarrázabal, director del Centro de Políticas Públicas de la UC, en su presentación destacó a la Sociedad Protectora de la Infancia que fue creada en 1894 y al Hogar de Cristo en 1944 como las pioneras en materia infantil, adelantándose a organismos como el Consejo Nacional de Menores, fundado a fines de los 60. “Pasaron 80 años entre que una fundación y otras como el Hogar de Cristo, que ya estaban trabajando por la infancia, para que el Estado dijera: Oh, parece que tiene sentido involucrarse y desarrollar una institucionalidad para la protección de la infancia”.
En relación a adultos mayores, la primera OSC de la que se tiene registro es la de San Vicente de Paul, creada en 1854 y luego, nuevamente, el Hogar de Cristo en 1944. “Las pensiones asistenciales son de 1975, que es bienvenido, pero ya habían pasado muchos, muchos años”, comentó Ignacio Irarrázabal.
Otras conclusiones que se destacan: las OSC tienen un trabajo focalizado en grupos de alta vulneración económica y cuyas redes sociales y afectivas son insuficientes, son un complemento, consideran las necesidades específicas de cada persona y de la comunidad, canalizan recursos privados y públicos y sus acciones contribuyen a cambios culturales, sociales y en las políticas públicas.
Al finalizar su discurso, el secretario de Estado señaló: “La invitación es a que seamos colaboradores, con ustedes, con el Estado, el sector privado, la academia, la población afectada, en forma organizada, profesional, medible, con resultados y responsabilidad”.
El estudio completo, sus conclusiones y desafíos los puedes encontrar en el sitio web de Sociedad en Acción, haz clic aquí. (https://www.sociedadenaccion.cl/publicacion/comprometidos-con-chile-la-contribucion-de-las-organizaciones-de-la-sociedad-civil-a-la-infancia-y-las-personas-mayores